Alfonso Zurita: “el neoliberalismo se ha ganado su mala reputación e impopularidad”

Esta obra es una guía para conocer los nuevos modelos económicos y financieros que han entrado en pugna con el neoliberalismo en los últimos años y muy especialmente a partir de la crisis causada por la Covid-19.

¿Estamos al borde de una nueva era económica mundial? ¿La ortodoxia neoliberal que prevalece desde 1980 está en vías de extinción? Estas son algunas de las preguntas que plantea responder Neoliberalismo reset, un libro escrito por el máster en Relaciones Internacionales y Economía por la Johns Hopkins University y licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad de Sussex Alfonso Zurita Borbón.

Esta obra es una guía para conocer los nuevos modelos económicos y financieros que han entrado en pugna con el neoliberalismo en los últimos años y muy especialmente a partir de la crisis causada por la Covid-19.

Según Zurita, tanto los mercados libres neoliberales, como el sistema financiero monetario y el capitalismo de libre mercado, están siendo seriamente desafiados por la irrupción en escena de nuevos modelos económicos y financieros, y nuevas contra-corrientes capitalistas más humanitarias, equitativas y morales, que están ganando más y más ímpetu en el panorama internacional.

Neoliberalismo reset aborda algunos temas que la crisis ha vuelto a reavivar intensamente. La obra describe y analiza la actual realidad económica desde la doble perspectiva del choque entre antiguos y nuevos modelos económicos junto a las fallas inherentes del sistema financiero internacional.

Alfonso, ¿por qué cree que estamos al borde de una nueva era económica mundial?

Desde principios del siglo XXI y cada día de manera mas acentuadamente, estamos siendo testigos de cómo la economía financiera-monetaria está siendo gradual y progresivamente reemplazada por la economía digital-virtual y su amplia base de atractivas criptomonedas. El fenómeno o hecho representa un proceso cuya progresión lógica es absolutamente irreversible. Tal y como ocurrió después de las primeras revoluciones industriales cuando la economía rural-agricultural fue substituida por la economía industrial-productiva, y subsecuentemente durante la década de 1980 esa ultima economía industrial-productiva fue a su vez substituida por la economía financiera-monetaria, se espera que la actual Cuarta Revolución Industrial, o Revolución Industrial 4.0 en la que estamos sumidos, conlleve a una substitución total y completa de nuestro actual tipo de economía financiera-monetaria por la economía digital-virtual.

Usted sostiene que la ortodoxia neoliberal que prevalece desde 1980 está en vías de extinción. ¿Qué sistema la sustituirá?

Está muy claro que al tiempo que el actual umbral de caos y desorden creado por la Crisis Covid-19 está causando una gran re-configuración global, o un enorme re-ordenamiento industrial-empresarial, por otro lado, también se han vuelto a avivar y exacerbar mucho más algunas cuestiones, tales y como, la gran duda colectiva y pérdida de confianza en el consenso y la ortodoxia neoliberal, ya han generado tanto cambios dentro y fuera del sistema, como variaciones en su manera de funcionar. En general, tanto el consenso, ortodoxia, mandatos y dictados neoliberales, como el modelo económico neoliberal de mercado libre, el agresivo modelo financiero-monetario Friedmaniano y el capitalismo neoliberal de mercado libre/de accionista, han perdido mucha popularidad al igual que generado mucho pensamiento de contra-corriente en búsqueda de modelos, sistemas y reformulaciones que rindan mejores y mas equitativos resultados.

A pesar de que el Orden Mundial Neoliberal (OMNL) sigue prevaleciendo (el pensamiento y la practica neoliberal están muy profundamente imbuidos en marcos institucionales y estructuras económicas multilaterales), ha sido seriamente desestabilizado por el renacimiento y la creciente expansión de modelos mercantilistas, proteccionistas-aislacionistas, como sobre todo el Neo-Nacionalismo (NN), o Nuevo Nacionalismo. De manera similar, en un nivel académico subyacente la abrasante critica que rodea al capitalismo neoliberal de libre mercado también ha generado un fuerte flujo de contra-modelos capitalistas revisados, como el Capitalismo Progresista de Joseph Stiglitz, así como la muy profética Teoría Monetaria Moderna (TMM). Aunque su trascendencia absoluta todavía no está del todo clara, indican claramente que tanto el capitalismo neoliberal de libre mercado como el modelo financiero-monetario, también están siendo desafiados peligrosamente en la práctica y en la teoría por nuevos modelos y propuestas revisadas que están gradualmente ganando mas y mas terreno.

No hablamos, en cualquier caso, de la desaparición del capitalismo, sino de cierto amortiguamiento o corrección, ¿correcto?

Si, como he explicado anteriormente, mientras que todo lo relacionado con el NL está bajo mucho escrutinio y muy en jaque – consenso, ortodoxia, mandatos y dictámines neoliberales, modelo económico neoliberal de mercado libre y agresivo modelo financiero-monetario Friedmaniano –, en círculos académicos, el capitalismo neoliberal de mercado libre/de accionista, ha perdido igualmente muchísima popularidad al igual que generado la formulación de muchas corrientes heterodoxas o alternativas para substituirlo. En el último Foro Económico Mundial de Davos 2021, se llegó durante su transcurso a incluso proponer nuevos tipos de variantes del capitalismo tales y como Capitalismo Egalitario o Capitalismo Equitativo.

No obstante, y hasta hoy en día, una de las nuevas y revisadas corrientes heterodoxas capitalistas que mas huella esta dejando a través del panorama internacional es el Capitalismo Progresista, promovido vehementemente por el Premio Nobel en Economía, Joseph Stiglitz. El nuevo tipo de capitalismo alternativo del siglo XXI impulsado por el capitalismo progresista, implica principalmente un cuidadoso y delicado equilibrio entre el gobierno, los mercados y la sociedad civil.

¿Corre riesgo la globalización tal y como la conocemos? ¿Regresaremos a una época de mercados más nacionales y cerrados?

A pesar de la todavía-fuerte supremacía del OMNL, el neoliberalismo se ha ganado, sin embargo, mucha mala reputación e impopularidad. Su desarrollo sesgado y sus beneficios dispares han conseguido que una horda enorme de perdedores insatisfechos y enfurecidos se vuelva en su contra, favoreciendo mucho más otros tipos de modelos alternativos. En la práctica, el renacimiento de modelos económicos mercantilistas proteccionistas-aislacionistas, basados en fuertes emociones anti-globalización y anti-libre mercado, probablemente representa la fuerza actual más potente que amenaza la estabilidad del OMNL. El prototipo de vanguardia del nuevo fenómeno – el Neo-Nacionalismo, o Nuevo Nacionalismo, Democracia Iliberal, o Nacionalismo de Derecha – se ha vuelto enorme en EEUU y se está extendiendo crecientemente por Europa y el resto del mundo. Desde el colapso económico global de 2007-2015, el nuevo nacionalismo neo-tribal ha estado hirviendo en la política estadounidense y europea, cerrando fronteras y restaurando sociedades a una homogeneidad del pasado. El NN ya ha echado raíces muy fuertes que se extienden desde los EEUU, hacia el oeste de la UE – en el Reino Unido (RU) y Francia, hasta el este de la UE – en Hungría, Polonia y Austria, e incluso llegando hasta Rusia y Australia.

Claramente, el OMNL y la élite transnacional se encuentran en una coyuntura histórica, en la que el proceso de globalización neoliberal está siendo seriamente interrumpido por el NN y las víctimas de la globalización. Por ahora, el NN y su lucha social continúan ampliándose por Europa y otras regiones del mundo, con el objetivo principal de romper con el OMNL para construir una nueva comunidad global democrática basada en la restauración de la soberanía nacional económica, política y cultural.

Más allá de la congestión del mercado internacional. ¿La pandemia al obligar a una mayor vigilancia de las fronteras puede acelerar este cambio económico?

Si, absolutamente. Ya lo ha hecho. Si bien el mundo había comenzado a recuperarse después de la Crisis Financiera Global 2007-2015, sigue muy enfangado y afectado por la actual Crisis Covid-19, o Coronavirus, la cual ha vuelto a generar un frenazo en la actividad económica, productiva y comercial mundial. El mundo entero ha sucumbido al virus Covid-19, el cual ha surgido como una nueva, silenciosa y agresiva amenaza global, afectando fatalmente a millones de personas y generando consecuencias socioeconómicas mucho peores que las sufridas por la Gran Depresión, o la reciente Gran Recesión. Comprensiblemente, tal varapalo económico global ha dado mucho de que hablar, pero sobretodo, ha hecho supurar viejas heridas en torno al consenso y la ortodoxia neoliberal que predominan desde la década de 1980. Aunque se espera que la recuperación económica de la Crisis Covid-19 sea mucho mas rápida que la de las dos previas grandes crisis mundiales, las consecuencias sufridas por la economía planetaria están cambiando el panorama económico de manera irreversible, asegurando así que nada vuelva a ser igual que antes de la pandemia. Mientras que los sectores de transporte, turismo, construcción y educación están siendo los mas afectados, arrastrando perdidas billonarias, innumerables grandes industrias y empresas, y sobre todo, miles de pequeñas y medianas empresas (PYMEs), microempresas y empresarios, han perecido y continúan haciéndolo.

En medio de tal desbarajuste económico y entre voces de una “gran re-sintonización financiera”, la Directora Gerente del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, prevé el advenimiento de un “gran cambio”, planteando incluso que sería buen momento para un “nuevo Bretton Woods”. De igual forma, el Deutsche Bank, cree que la actual, Era del Desorden, generará a su vez “un nuevo `súper-ciclo´ económico”. Mientras que la primera ha estresado que “las dificultades económicas de hoy son las mismas que las dificultades a las que se enfrentó el mundo al final de la Segunda Guerra Mundial”, el segundo ha advertido que la actual fase que atraviesa el mundo ha “acelerado un cambio de etapa en la economía, que se caracterizará por una revisión drástica en las principales tendencias económicas que han guiado la globalización durante los últimos tiempos”.

¿Debemos olvidarnos de la economía del crecimiento? ¿Es posible conjugar crecimiento y ecología?

En mi humilde opinión, el principal reto económico actual sigue siendo disminuir la brecha existente entre pobres y ricos. Sin embargo, la confianza en que esto se producirá de forma casi automática gracias al progreso económico no solo se ha revelado equivocada sino que ha obviado las enormes disfunciones que la expansión global de la actividad económica ha provocado sobre el medio ambiente. Debe haber mayor concienciación al respecto, al igual que mayor respeto hacia todo ello.

El reto del futuro es mejorar el nivel de vida de la humanidad -y especialmente de los que están hoy en peor situación- y al mismo tiempo aproximarnos a un modelo económico más “sostenible” en el sentido que hoy se utiliza esta palabra, es decir, que nuestra gestión económica no ponga en peligro – ni para hoy ni para el futuro – los complejos e imprescindibles servicios que el medio ambiente nos proporciona.

En muchos países, existe ya la economía-ecológica o basada en recursos naturales – países nórdicos como Suecia, Noruega y Finlandia, representan grandes ejemplos de ese tipo de economías. En Bolivia también. El Presidente Evo Morales diseñó, generó y estableció el tipo de modelo económico que sigue prevaleciendo en el país- el Modelo Económico Social Comunitario Productivo –, el cual se basa en una buena mezcla e interacción entre el Estado, la población étnica-indigena y la pachamama, o Madre Tierra, que tanto respetan, trabajan y adoran por todo tipo de razones esos grupos anteriormente excluidos. Los recursos naturales para ellos representan la base primordial de vida, convivencia y desarrollo económico.

A nivel español, ¿cuáles son los principales retos económicos a los que se enfrenta nuestra economía y cuál podría ser una posible solución?

A pesar de los reveses de las ultimas crises sufridos por el mundo entero, está muy claro que España ha tenido y sigue teniendo un gran potencial económico y un sistema y una estructura financiero-bancaria muy solidos. Antes de la Crisis 2007-2015, España iba a la cabeza de los países de la Eurozona en cuestión de desarrollo y crecimiento, y se espera que una vez mas, en poco tiempo vuelva a estarlo.

Aun así, si hay entre muchas otras, unas cuantas áreas prioritarias que requieren, en mi modesta opinión, una atención mas especial. En general y a grandes rasgos, creo que es necesario adaptar y modificar nuestro tipo de economía para su buena absorción y mezcla de tanto los cambios generados por la ecologización planetaria que esta teniendo lugar, como de los cambios generados por la digitalización planetaria que estamos experimentando al mismo tiempo. Hace falta una economía mas moderna y adaptada a los cambios planteados por el siglo XXI – que sepa mezclar y combinar bien lo medioambiental-ecológico con lo tecnológico-digital – lo cual no es nada fácil puesto que son dos naturalezas totalmente diferentes y contradictorias la una con la otra, pero indudablemente muy necesario. Si se consigue, todo ello producirá una fusión simbiótica entre lo medioambiental y lo tecnológico muy fructífera y mucho mas en armonía con nuestra realidad planetaria y los avances y cambios tecnológico-digitales que la caracterizan moldean su futuro próximo. Por ultimo, el Gobierno de España actual también ha destacado mucho y dado mucha prioridad inmediata a la internacionalización de la economía española, lo cual obviamente también la integraría mas al mas grande contexto internacional de cambios, desplazamientos y mutaciones económicas al que estamos sujetos.


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